La presidenta de la Sociedad Rural del Neuquén, María Cecilia de Larminat, manifestó su sorpresa y preocupación ante cambios en el mercado ganadero que, según afirmó, no fueron anticipados en las reuniones previas con Nación y provincias.
Inquietud por la falta de previsibilidad
De Larminat destacó que la ganadería depende de la previsibilidad para su desarrollo y que cualquier modificación inesperada afecta directamente a los productores. “Nos sorprende porque no estábamos al tanto, y eso genera incertidumbre en un sector que necesita estabilidad”, señaló.
En relación con los posibles efectos en los precios, sostuvo que aunque la medida podría traer beneficios potenciales, no hay garantías de que se traduzcan en una reducción real para los consumidores. “La carne sin hueso sigue ingresando libremente y nunca hubo precios más baratos”, advirtió.
Desafíos de la producción en la Patagonia
La dirigente rural también explicó las particularidades del ciclo productivo en la región, donde las estaciones están marcadas y obligan a los productores a tomar decisiones con anticipación.
“En la Patagonia no podemos especular con los tiempos. El invierno llega y hay que descargar los campos, ya sea con el destete de terneros, la venta de vacas viejas o la salida de animales improductivos. Este tipo de cambios generan aún más incertidumbre”, detalló.
Desde la Sociedad Rural del Neuquén esperan mayor claridad en las políticas para el sector y una comunicación más fluida con las autoridades nacionales para garantizar previsibilidad y estabilidad en la actividad ganadera.